ARROZ Yamaní integral
En la refinación del cereal, lo que conocemos como arroz blanco, se pierde de la semilla original el 30% de su peso y con ello la mayor parte por sus nutrientes.
El 80% de los ácidos grasos insaturados, el 60% de sus sales minerales y prácticamente todas las vitaminas presentes originalmente, se pierden al refinar al arroz.
Por lo que la industria produce un arroz bien blanco, pero de escaso valor nutritivo.
Cuando se habla de arroz integral se hace referencia al grano completo, con su cascarita o salvado, que es la parte más nutritiva.
La mejor calidad de arroz integral es aquella que no presenta granos verdes ni de color oscuro. Y de estos hay diferentes variedades, entre ellos el yamaní.
El arroz integral yamaní es el tipo menos refinado de los arroces, y es el preferido por quienes practican la alimentación macrobiótica, por su equilibrado pH y además por ser el más “positivo” según la ciencia oriental y de muy buena asimilación por el organismo.
El arroz integral es el mejor alimento para consumirlo diariamente, debido a que es el cereal que contiene más vitaminas del complejo “B” y las más fáciles de digerir.
Es sabroso, nutritivo, sacia el apetito y muy rendidor, 250 gramos permite la obtención de cuatro abundante porciónes.
Salud en cada grano
Algunas bondades saludables del arroz yamaní integral son:
No contiene gluten por lo que es un alimento para celíacos.
Comprende la gama completa de la vitamina “B”.
Favorece la flora intestinal.
Es hipoalergénico (no produce alergias).
Contiene la mayor parte de los aminoácidos esenciales.
Estabiliza la concentración de azúcar en la sangre.
Su consumo contribuye notoriamente sobre enfermedades crónicas como: cardiopatías; hipertensión arterial; diabetes y ciertos tipos de cáncer.
Arroz Yamaní para dietas especiales
Según los orientales, el arroz es el grano perfecto en cuanto al equilibrio Yin – Yang, por los que muchas personas confían en este alimento a la hora de hacer dietas estrictas.
El arroz yamaní integral es muy utilizado para los regímenes de mono-dietas, ya que conserva las vitaminas y minerales que lo hacen muy completo en cuanto al equilibrio proteico-vitamínico-mineral.
La mono-dieta de arroz yamaní integral es indicada para los casos de retención de líquidos, y problemas circulatorios, pero siempre con el control de un médico.
Su nivel de acidez-alcalinidad o pH es de 7, el equilibrio perfecto según los japoneses.
Composición
Aproximadamente, 100 gramos de arroz yamaní integral aportan:
Calorías 350
Proteínas 7,4 gr.
Grasas 2,2 gr.
Carbohidratos 74,1 gr.
Índice glucémico (IG) 50
Lípidos 2,2 gr.
Fibra 4,0 gr.
Vitamina “B”1 1,2 mg.
Vitamina “B”2 0,09 mg.
Vitamina “B”3 5,20 mg.
Vitamina “B”6 0,67 mg.
Vitamina “E” 0,06 mg.
Sodio 10 mg.
Potasio 150 mg.
Calcio 23 mg.
Fósforo 325 mg.
Hierro 2,6 mg.
Magnesio 157 mg.
Fluor 0,06 mg.
Yodo 200 UI
Zinc 800 a 2000 UI
Cobre 240 UI
Manganeso 1100 UI
Selenio 40 UI
Muy digerible:
el arroz yamaní integral es uno de los cereales más digeribles. Mientras que el trigo pelado, avena en grano y cebada requieren una cuidadosa masticación, ya que no siempre es bien tolerada por el hígado, el tipo de almidón presente en el yamaní, se digiere fácil y rápidamente, aproximadamente en una hora.